de un viejo amor que se acercaba
y sigiloso, en pose de espera,
tan solo la ví llegar y mi alma se envolvió de ella.
Gratos recuerdos llegaron a mi mente
de su amor, mi alma estaba llena,
fuímos del mundo, Romeo y Julieta.
En cada rincón de nuestras vidas
siempre hubo espacio para el amor,
donde nos queríamos con gran ternura
y vivíamos, en un derroche de pasión.
Ella se posó en mi alma
y fuímos del reloj las manecillas,
para poder detener el tiempo
y hacer de lo nuestro las octavillas,
de aquel hermoso y dulce poema
donde mis versos formando estrofas
le decían a la glamorosa doncella,
que el sentir de mi alma es solo para ella.
De pronto me volvió el amor
más que recuerdos me trajo luz
y abrió caminos para este corazón,
que ya vencido de tanta espera
se refugiaba en la oscuridad de su sinrazón.
No comments:
Post a Comment