tu amor agónico, lastre de mi osadía,
impertérrito en el inicuo silencio
de un inefable amor en triste agonía.
¿Cuántas noches habrá pasado?
cuanto amor derrochado en pasión,
para que el tiempo se hiciera cómplice
de esta triste y desgarrante desilusión.
Tu amor de sueños, delirante fué,
equivocados fuímos en un mundo al reves,
fuiste la luna de mis tristes noches
indiferentes sueños de amor y derroches.
Perdidos estábamos por largo tiempo,
fuimos distancias oscuras en rutas angostas,
sacrificios de cuerpos en piras prohibidas.
Y como nada dura para siempre,
aquel amor cimentado en cajas de naipes
se convierte en oasis deseado del desierto.
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